Los océanos del mundo mueven sistemas mundiales que hacen que la Tierra sea habitable para la humanidad. Todo el agua que conocemos y consumimos proviene en última instancia del mar. Pero, a veces, parece que olvidamos lo importantes que son para nuestro desarrollo en todos los aspectos. ¡Representan el 99% del espacio vital de nuestro planeta! Si nos paramos a pensar detenidamente en el bien que nos proporcionan, encontramos datos asombrosos, como que contienen millones de especies vivas en su ecosistema; o que la pesca emplea a más de 200 millones de personas. Y, con todo, el 40% de todos los océanos del mundo se ven gravemente afectados por la actividad humana. Algo que no nos podemos permitir.
Además de todo esto, el 30% del planeta está cubierto por bosques que proporcionan seguridad alimentaria y refugio, y son fundamentales para combatir el cambio climático. Los bosques protegen la diversidad biológica y, no nos olvidemos, las viviendas de la población indígena. ¿Sabías que cada año desaparecen 13 millones de hectáreas de bosques? La deforestación y la desertificación han afectado a las vidas de millones de personas y suponen un gran reto para el desarrollo sostenible. ¡Pero podemos evitarlo!
¿Qué queremos y qué creemos posible?
Queremos conservar y utilizar de forma sostenible los océanos, los mares y los recursos marinos para el desarrollo sostenible.
Queremos gestionar los bosques de forma sostenible, luchar contra la desertificación, detener e invertir la degradación de las tierras y detener la pérdida de biodiversidad. Es un objetivo posible. ¡Luchemos para conseguirlo!
