Tradicionalmente existía la idea predominante de que los inversores no tenían presentes en sus decisiones de inversión métricas relativas al medio ambiente, al ámbito social o al gobierno corporativo (criterios ESG). Se consideraba que aquellos no cambiarían sus inversiones por cuestiones ESG, pero la realidad está cambiando de forma acelerada en la medida en que cada vez más asocian el desempeño financiero con el desempeño relacionado con la sostenibilidad. De este modo, los inversores están detectando un fuerte vínculo entre el desempeño de la sostenibilidad corporativa y el desempeño financiero, de ahí que estén utilizando los datos relacionados con la sostenibilidad como una justificación para las decisiones de inversión como nunca antes se ha hecho.
Los responsables corporativos, en este sentido, deben ir dando respuesta a este nuevo comportamiento inversor. Deben adaptar su discurso a las demandas de una gestión pensando más en el largo plazo y en las propias experiencias del inversor.
El problema es que muchas empresas no tienen nada que contar en relación al criterio ESG. La mayor parte considera que la sostenibilidad es fundamental para su estrategia global, pero apenas han avanzado de forma visible en la incorporación de criterios ESG.
Este estudio, elaborado por el MIT Sloan Review y por The Boston Consulting Group (BCG), presenta un análisis en profundidad de la capacidad de los inversores para conectar el desempeño relativo a la sostenibilidad y el desempeño financiero, así como las oportunidades e iniciativas a las que se enfrentan los líderes corporativos para dar respuesta a esta cada vez mayor demanda de los inversores. En base a una encuesta realizada en 2015 a unos 3.000 gestores e inversores en 100 países diferentes se detecta que:
- Existe un claro desfase entre la percepción de los inversores y de los gestores.
- Los inversores mayoritariamente consideran que la sostenibilidad crea valor tangible.
- Casi la mitad de los inversores dice que no va a invertir en una empresa con un registro de escaso nivel de sostenibilidad.
- Existe una clara falta de comunicación entre las empresas y los inversores.
- Los índices de sostenibilidad está perdiendo peso en el ámbito de las decisiones de los inversores y de los gestores.
- Aunque las empresas consideran importante desarrollar una estrategia de sostenibilidad, muy pocas la tienen.
Unruh, D. Kron, N. Druschwitz, M. Reeves, H. Rubel y A. M. zum Felde, “Investing For a Sustainable Future”, MIT Sloan Management Review, May 2016. Descargar informe